
El tratamiento de la autoeliminación de las personas en una sociedad cada vez más digital y menos sensible, los signos y síntomas de alarma que deben llamar la atención, y por último el tratamiento que los medios de comunicación desarrollan al dar a conocer este tipo noticias a fin de evitar que aparezca el efecto Werther. Hablamos de cuando un relato puede tener la fuerza suficiente para generar hechos reales.
La Lic. Liz Aguiar, profesional de salud mental del Hospital Ingavi, nos habla sobre la autoeliminación, un problema de salud pública que afecta a personas de todas las edades y condiciones sociales. Según ella, hablar de esta problemática, es clave, pero es fundamental hacerlo de manera responsable para evitar promoverlo sin querer.
Ella menciona que uno de los fenómenos más estudiados en este contexto es el efecto Werther, también conocido en países anglosajones como “copycat effect” y en Japón como “efecto Yukiko”. Este fenómeno se refiere al aumento de conductas suicidas por imitación tras la difusión de un suicidio, especialmente cuando involucra a una figura pública y cuando los medios de comunicación cubren el hecho de forma sensacionalista y con muchos detalles.
¿Qué es el efecto Werther?
El término proviene de la novela Las penas del joven Werther de Johann Wolfgang von Goethe, publicada en 1774. Tras su difusión, se reportó un aumento de suicidios en jóvenes europeos que imitaban al protagonista. Desde entonces, diversos estudios han confirmado que las noticias de suicidio, mal gestionadas, pueden desencadenar un “contagio” emocional en personas vulnerables.
Este fenómeno no es solo literario ni del pasado: hoy, en plena era digital, su impacto se ha amplificado debido a la velocidad de circulación de las noticias en redes sociales, portales de noticias, televisión y prensa escrita.
La profesional menciona que la forma en que se informa sobre este hecho, puede tener consecuencias graves (he aquí el papel de los medios de comunicación y las redes sociales) la prensa presenta la autoeliminación, mayoritariamente como algo inexplicable o se le atribuyen causas simplistas.
En la mayoría de los casos se nombra o detalla el método utilizado y no se tienen en cuenta los antecedentes de enfermedad mental de la víctima, no se suministra información acerca de ayuda disponible o sobre las redes de apoyo para personas con conducta suicida.
Las precauciones a la hora de informar sobre el hecho, puede tener consecuencias graves ya que hay investigaciones que han demostrado que ciertos enfoques periodísticos aumentan el riesgo de imitación, sobre todo cuando:
Se da excesivo detalles del método utilizado o se describe el lugar del suicidio de forma gráfica, también se presenta la noticia de manera sensacionalista, con titulares llamativos o emotivos o amarillistas.
Cuando se idealiza a la persona fallecida, mostrándola como heroica por llegar a tal decisión o romántizando el hecho, como que no tuvo otra alternativa o la persona es famosa, aumentando la identificación del público con su ídolo que tomo la drástica decisión como cuando lo sucedido con Marilyn Monroe.Por el contrario, un tratamiento responsable de la noticia puede contribuir a prevenir suicidios.
Recomendaciones para una mejor comunicación
Los organismos internacionales como la Organización Mundial de la Salud (OMS) y expertos en salud mental proponen pautas específicas para los medios de comunicación:
- Tener en cuenta el saber informar con respeto, evitando el sensacionalismo.
- No detallar el método ni el lugar exacto ni compartir notas o cartas póstumas
- Aguiar recomienda sensibilizar sobre que el suicidio es un fenómeno multicausal que puede prevenirse y por sobre todo consultar a especialistas en salud mental antes de publicar.
- Las grandes cadenas noticiosas a nivel internacional tienen un manual de estilo o de ética para sus trabajos noticiosos y la forma de abarcar este tipo de noticias, al igual que en nuestro país los grandes medios poseen sus manuales de ética periodística.
¿Cómo hablar del suicidio en la vida cotidiana?
Aguiar sostuvo que no solo los medios tienen un rol: como sociedad, debemos promover una comunicación cuidadosa. Evitar la curiosidad morbosa, mostrar respeto a los familiares y no divulgar rumores o teorías es fundamental. Además, al hablar de la autoeliminación, es importante recordar que la conducta suicida no es un acto aislado, sino que generalmente está asociada a factores como problemas de salud mental, dificultades económicas, abuso o situaciones de soledad.
¿Que podemos hacer al respecto como sociedad?
Por sobre todo ese llamado a la responsabilidad colectiva el suicidio puede prevenirse, y todos tenemos un papel en esa tarea. Desde periodistas hasta a los usuarios de redes sociales, debemos recordarles que las palabras importan y mas al compartir noticias de este tipo, pensemos siempre en quienes podrían estar pasando por un momento de vulnerabilidad y asegurémonos de no contribuir al dolor con más dolor .
La profesional recomienda que si conoces a alguien que pueda estar en riesgo, anímalo a buscar ayuda; en el hospital IPS Ingavi podes agendar una cita a través del 080011500 o en ventanilla recordar que los profesionales de salud mental y los círculos de apoyo son recursos fundamentales.