Una mujer embarazada sintió dolores repentinos en los pasillos del Hospital de Especialidades Quirúrgicas Ingavi. Los profesionales de salud descubrieron que ya estaba teniendo contracciones y, de repente, nació un bebé prematuro la paciente de 27 años fue asistida por la Obstetra Eva Rivarola y enfermeros de las urgencias.
El bebé nació con 30 semanas de gestación y pesaba solo 1.300 k .Debido a su prematuridad, el bebé tuvo que ser intubado y conectado a una bolsa de resucitación manual; fue asistido por el Lic. Jorge Achucarro, especialista en Neonatología acompañado del equipo de atención médica, junto con la Dra. Marta Díaz, emergentóloga, y los pediatras Dr. Guillermo Bareiro, Dra. Carolina González, Dra. María José Genes y Dra. Cynthia Sanabria.
El Lic. Jorge Achucarro, acompañó al bebé hasta el Hospital Central IPS en ambulancia con soporte para prematuros donde se encuentra en espera de una atención especializada. La madre ya fue trasladada al mismo hospital y se encuentra estable.
Este nacimiento inesperado es un recordatorio de que la vida puede ser impredecible. Los médicos y el personal del hospital están trabajando arduamente para cuidar al bebé y asegurarse de que reciba la atención que necesita.
