En vista a los días con altas temperaturas y las consecuencias que puede producir en las personas, desde el Instituto de Previsión social aconseja tomar las debidas precauciones evitando la exposición al sol y siguiendo las indicaciones de especialistas como cardiólogos, dermatólogos, entre otros.
Por lo general en esta época del año en la que se registran altas temperaturas, las personas deben mantenerse hidratadas, ya que, el calor y la exposición al sol producen deshidratación; esto lleva a que la persona tenga una hipotensión, es decir, que la presión arterial vaya bajando, provocando desvanecimiento, vértigo, mareo, vómito, palpitaciones.
Las personas que más sufren las elevadas temperaturas son las que padecen de patologías cardiacas, hipertensos y diabéticos. Los pacientes que más se complican en este tipo de situación son los que tienen cardiopatía isquémica porque al dilatarse la arteria la circulación de la sangre es más lenta y tiende a formarse coágulos. Por eso es necesario tomar líquido y principalmente agua.
Ante las altas temperaturas una persona debe consumir un promedio de 2 a 3 litros de agua de forma diaria para mantener el cuerpo hidratado. Otra recomendación es no exponerse al sol en horarios picos de 10:00 a 16:00 horas y principalmente no exponer a niños en edad prematura y adultos en edad avanzada.
Así también se recomienda consumir alimentos livianos a modo de tener una buena digestión evitando intoxicaciones con alimentos pesados atendiendo las altas temperaturas.
