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XVI Campaña de Prevención y Diagnóstico oportuno al Cáncer de Piel

XVI Campaña de Prevención y Diagnóstico oportuno al Cáncer de Piel

En la mañana de este miércoles 31 de octubre, se llevó a cabo en el pabellón 2 de la Policlínica del Hospital Central del Instituto de Previsión Social, el control de Manchas y Lunares correspondiente a la XVI Campaña de Prevención y Diagnóstico oportuno al Cáncer de Piel organizada por la Sociedad Paraguaya de Dermatología. 

Dicha jornada inició a las 08:00 horas y se extendió hasta las 12:00 horas, la misma tiene como objetivo general la prevención primaria y secundaria del cáncer de piel. “En caso de que se detecte se realiza el tratamiento y seguimiento correspondiente”, expresó la Dra. Vania Diez Pérez, jefa del servicio de dermatología del Hospital Central.   

Esta jornada se realiza todos los años y participan todos los centros asistenciales que cuenten con un Servicio de Dermatología, todos estos centros cuentan con un cuestionario único realizado por la Sociedad Paraguaya de Dermatología, de modo a tener una base de datos unificada. 

En la campaña del año anterior (2017) se atendieron 985 pacientes y se detectó un 6% de cáncer de piel más precisamente melanoma y no melanoma, y un 3,5% de dermatosis precancerosas.

Es importante tener en cuenta que la tasa de incidencia del cáncer de piel va en aumento a nivel mundial, con un incremento que osilla entre un 3% y 7%. En el mundo se estima que mueren 66.000 personas al año por cáncer de piel. 

Cuidados de la piel

La piel está formada por dos capas: la capa externa llamada epidermis y la interna llamada dermis.

Sin la piel el organismo estaría desprotegido. Por eso, dada su importancia, se le debe brindar los cuidados necesarios para mantenerla sana y de manera muy especial en días de temperaturas elevadas sobre todo en nuestro país donde el sol es muy agresivo y nocivo para la piel.

La luz solar produce rayos infrarrojos (calor), luz visible (colores), ultravioletas (UVA, UVB) que producen el bronceado y los cambios celulares que predisponen al cáncer de la piel. Esta radiación es mayor entre las 10:00 de la mañana y las 16:00 de la tarde. A estas horas el nivel de radiaciones UV es mayor, más agresivo y cancerígeno.

Los factores de protección solar únicamente ofrecen un incremento en el tiempo de tolerancia a los rayos solares (especialmente por rayos UVB), pero no anulan, en general, los efectos del sol en su totalidad.

Los factores de protección deben aplicarse 30-45 minutos antes de iniciarse la exposición al sol, siendo eliminados por el sudor y el agua. Por ello se deben de aplicar frecuentemente cada 3 horas y sobre todo después del baño.

Los recién nacidos y los bebés menores de 6 meses no deben exponerse al sol ni aplicarse protector solar. Solo a partir de los 6 meses en adelante se los debe aplicar de modo a acostumbrarlos desde chiquitos con los protectores solares exclusivos para niños.

Los mayores de esta edad deben de exponerse al sol, ya que, es un productor de vitamina D, pero no deben exponerse a un broceado intenso y sobre todo a quemaduras, deja la piel muy predispuesta a cáncer en el adulto, su piel es mucho más frágil a modificaciones por la radiación solar. Siempre con filtros solares. La radiación solar se acumula y su efecto cancerígeno es acumulativo con la edad.

Debe reducir al mínimo posible la exposición de la piel a los rayos ultravioletas y a la luz visible de onda corta.

Estos son algunos consejos que pueden ser de utilidad

•    Salir al aire libre sólo antes de las 9 de la mañana y después de las 4 de la tarde. 
•    Utilizar ropa de colores claros, de algodón y si es posible con mangas largas de tela fina si se estaría por largo período expuesto a los rayos solares.
•    Consumir vitaminas A y C de manera reforzar la protección de la piel
•    Proteger la cara y manos con el factor de protección solar más elevado. Lo más adecuado es mayor a 30 de marcas que estén dermatológicamente testeadas.
•    Ante cualquier síntoma o signo de alarma acudir al centro médico más cercano.
•    Beber abundante líquido. No descuidar la hidratación permanente.