Esta fecha fue creada para instalar la problemática en la población y sensibilizar a las personas sobre la importancia en la prevención y el control. Siendo su objetivo informar y sensibilizar a las personas sobre la necesidad de adoptar medidas para prevenir y tratar el sobrepeso y la obesidad.
Actualmente de acuerdo a la clasificación internacional de enfermedades que establece la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Obesidad, se define como el anormal o excesivo almacenamiento de grasa, secundario a diferentes causas, incluyendo desbalance energético, fármacos y patología genética.
La Federación Mundial de Obesidad, la define como una enfermedad crónica recurrente y progresiva, enfatizando la necesidad de acción inmediata para la prevención y control de ella.
El ambiente obesogénico, caracterizado por la falta de acceso a alimentos saludables, la alta disponibilidad de comida procesada y ultra procesada, las porciones extra grande de comida, la falta de lugares seguros para la realización de actividad física, los horarios de trabajo y la publicidad de la industria a alimentos, entre otros, constituye uno de los principales factores que favorecen al desarrollo del sobrepeso y la obesidad.
La evidencia científica ha demostrado que el sobrepeso y la obesidad aumentan considerablemente el riesgo de padecer enfermedades crónicas no trasmisibles como ser la hipertensión arterial, la diabetes, cierto tipo de cáncer, gota, enfermedad vesicular y hepática, artritis y produce efectos psicosociales; como baja autoestima, depresión, que afectan la calidad de vida de quienes la padecen.
La obesidad disminuye la función pulmonar a través de una mayor resistencia en las vías respiratorias y una mayor dificultad para expandir los pulmones. Respirar cuesta más cuando hay exceso de peso y es mayor la presión sobre el diafragma.
Recomendaciones
El sobrepeso y la obesidad son en gran medida prevenibles.
Los entornos, las escuelas, las familias y las comunidades son fundamentales, pues condicionan las decisiones de los padres y los niños, y pueden hacer que los alimentos más saludables y la actividad física regular sean la opción más sencilla (accesible, disponible y asequible), previniendo de esta forma la obesidad.
Recuerde limitar la ingesta energética procedente de grasas y azúcares, aumentar el consumo de frutas y verduras (5 porciones al día), así como de legumbres, cereales integrales y frutos secos y realizar actividad física con regularidad, unos 60 minutos al día.
Como su etiología es multifactorial, en consecuencia su prevención, el diagnóstico, tratamiento y control deberá ser realizado por un equipo multidisciplinario, capacitado adecuadamente para tales funciones.
Programa de tratamiento para asegurados del IPS
El Consejo de Administración del IPS por resolución autoriza la creación del “Programa de tratamiento de la obesidad integral y multidisciplinario” y para tal efecto se conforma un equipo de trabajo integrado por Cirujanos, Endocrinólogos, Sicólogos y Nutricionistas, especializados en el área de obesidad.
A la vez enfocados en el tratamiento del Paciente con Obesidad donde realizan evaluaciones nutricionales, sicológicas y endocrinológicas a fin de determinar la causa y ofrecer un tratamiento integral y adecuado a cada paciente.
La finalidad de este tratamiento busca que el paciente se sienta con apoyo y motivado a alcanzar su meta que es disminuir los riesgos para la salud y llegar a un peso saludable de acuerdo a cada caso.
Cabe mencionar, que el tratamiento, es un proceso, no es una carrera de velocidad sino de resistencia, porque solo con la constancia y perseverancia, lograremos el cambio de hábitos alimentarios y conductuales que nos permitirá mantenerlo en el tiempo y mejorar la calidad de vida de los asegurados.
Obesidad en Pandemia
En cuanto al sobrepeso, este empeora las perspectivas de recuperación si se produce contagio de SARS-CoV-2.
La evidencia indica que la obesidad es un factor de alto riesgo y aumenta la gravedad del COVID-19 con más probabilidades de fallecer por esta enfermedad.
